Ajoblanco abrió sus puertas al público el pasado 5 de septiembre de 2019, para presentar todo el sabor del mediterráneo español.
Creado por el Chef Pablo San Román, quien ha triunfado en México desde hace 25 años, tiempo en que se ha ganado el respeto y cariño de los comensales con restaurantes como, Denominación de Origen, Puntal del Norte y Ekilore, Ajoblanco honra un estilo de vida, una cocina saludable con ingredientes frescos cuidadosamente seleccionados, algunos de ellos cosechados en su propio huerto, con los que se elaboran platillos tradicionales de la dieta mediterránea española, con un toque único y de altísima calidad.
En Ajoblanco, la comida y la bebida se fusionan. A través del consumo responsable, se aprovechan los grandes productos que se consiguen en México combinados con lo mejor de España y otros países de Europa como el cerdo ibérico, los aceites de oliva 100% españoles y las angulas de lomo negro, acompañado todo, de una excelente selección de vinos.
El menú presentado fresco e inspirador, fue muy variado, con pequeñas presentaciones de los platos más representativos de la zona, como el shot de ajo blanco, el cono de atún a la mediterránea, el bacalao negro a la gallega, la crema catalana y la tarta Santiago.
En un ambiente divertido, entre música y luces y en compañía de invitados especiales, clientes y queridos personajes del mundo gastronómico, los chefs ofrecieron diferentes estaciones de comida en las que incluyeron las ostras Sol Azul, jamón ibérico Extrem, encurtidos Embridge, y arroz ciego.
La mancuerna en cocina entre el chef San Román y el chef Manuel Victoria es fundamental y se demostró durante esta fiesta de sabores. Manuel, joven talento que lidera esta cocina en el día a día, plasma las directrices, el espíritu y la creatividad de San Román, con su propia mano y experiencia. El chef Victoria suma en su trayectoria un paso por cocinas que han marcado su estilo y saber hacer, como Denominación de Origen, en donde trabajó bajo la tutela del propio San Román; el Centro Castellano, el Restaurante Oca o La Tomatina.
En palabras del propio Pablo, “Manuel es un cocinero con una gran asertividad y una creatividad excepcional”, “mi intención es que nuevos chefs y expertos como él, tomen la batuta y el liderazgo de la cocina porque así es como deben ser los pasos generacionales, hay que enseñar y soltar para que los talentos más jóvenes plasmen todo su potencial».
En un ambiente muy agradable, donde la atención personalizada y servicio de calidad es una prioridad, se vive el auténtico sabor del mediterráneo español, en pleno corazón de Virreyes, dentro de la Ciudad de México.
Ajoblanco
Pedregal 45, Lomas de Chapultepec