Adobe Guadalupe Vineyards & Inn.
Conocí la vinícola Adobe Guadalupe hace algunos años cuando visité Baja California. El minuto que atravesé el patio principal supe que estaba entrando a la casa de una gran mujer. Quedé sorprendida con el magnífico gusto con que decoró su hogar y las seis habitaciones que conforman el B&B, que hace que Adobe Guadalupe sea una de las vínicolas más hermosas en el Valle de Guadalupe.
Tru me invita a pasar a la sala para disfrutar de la deliciosa chimenea. Abre una botella de Rafael, de las varietales Cabernet Sauvignon y Nebbiolo. Un vino de gran intensidad, buena estructura y complejidad en boca, con notas de fruta roja, chocolate y especias. Mientras lo desgustamos comenta que en sus 60 acres de viñedos producen también: Cabernet Sauvignon, Merlot, Cabernet Franc, Tempranillo, Shiraz, Chenin Blanc, Zinfandel , Mourvèdre, Cinsault y Viognier. El enólogo Daniel Lonnberg y el agrónomo José Manuel Hernandez se encargan que sus vinos salgan con muy alta calidad.
El vino Serafiel se produce con las uvas Cabernet Sauvignon y Syrah, y se añeja 10 meses en barrica de roble francés y americano. Resulta en buena estructura y cuerpo, muy frutal y especiado, con notas a vainilla y caramelo. Kerubiel lleva las varietales Syrah, Cinsault, Mourvèdre y Grenache. Resaltan frutos rojos como frambuesas, frutillas y cerezas, con buena acidez y persistencia en boca.
Salimos a dar un paseo y disfrutamos de la maravillosa vista a los viñedos, mientras Miller explica que nació en Indonesia y a los tres años se mudó a Holanda. Que creció dentro del mundo del vino pues en su casa se consumía a diario. El aroma que más la seduce es el olor del sudor de los caballos y de sus perros y el del cuero combinado con fruta. "Confío en mi equipo. Yo se a dónde puedo ayudar a esta empresa y dejo a la gente que sabe mejor que yo hacer el resto. Soy hábil para vender y promocionar mi vino. Me gusta mostrarles a los mexicanos que otros paises quierennuestros vinos. Los libero al mercado cuando están completamente listos para beber. También amo la gastronomía y en maridaje soy muy buena", afirma. Su espíritu aventurero y personalidad visionaria le brindó oportunidades que luego se conviertieron en éxito. "No puedes fallar. Somos muy honestos. Hacemos todo by the book . Somos precisos, por eso tenemos mucho éxito. Puedes tener las mejores uvas y el mejor vino, pero si se queda en la cava no pasa nada. Hay que venderlo. Yo creo en el producto y por eso lo promociono ", dice emocionada.
Ahora Tru ha decidido delegar esta venta al grupo Ferrer y Asociados en la Ciudad de México y se mantendrá al frente en Ensenada y Estados Unidos. Lo acaba de comunicar este primero de noviembre en el contexto de una comida maridaje en el restaurante Fonda Fina de la Colonia Roma. Propuso un maridaje con sus vinos y los platillos de Juan Cabrera. Nos recibieron con Jardín Romántico (Chardonnay) que nos abrió el apetito.
Luis García, director operativo de la bodega, comentó que la etiqueta Kerubiel era la preferida del sr Miller, por su amor a la región de Châteauneuf du Pape, lo que lo hizo traer a México varietales nativas de esa zona, como la Syrah, Cinsault, Mouvèdre y Grenache. "Es un vino consentido de Adobe Guadalupe por ser complejo y a la vez elegante. Kerubiel 2013 es versátil y rompe el paradigma de que hay que maridar vino tinto con carnes rojas, y vino blanco con pescados. Le va muy bien a la gastronomía mexicana como es el caso de la sopa de tortilla, pues combina excelente con los los chiles secos como guajillo o morita".
Rafael fue el vino elegido para la costilla de res con el extraordinario mole manchamanteles de Fonda Fina. Su potencia y estructura resaltan el platillo. "El tanino se encuentra pulido pues es una añada 2012 que pasó 13 meses en barrica nueva de roble francés. La primera añada de Rafael fue en 2008 y seguramente va a tener una guarda más larga que los demás arcángeles. Es un vino que en California se vende muy bien y que se está redescubriendo en México", comparte Luis.
Serafiel, realizado con Cabernet Sauvignon y Syrah, fue el vino que escogieron para maridar el delicioso flan de queso de Fonda Fina. Le va estupendo por su expresión aromática , notas de vainilla y cremosidad. "De los tintos es el que más se expresa en nariz. Es un vino muy femenino , sutil y que capa tras capa, devela su enigma. ¡Además es la mezcla favorita de Tru Miller quien la sirvió en una cena de estado en Holanda y encantó!", agrega García.
Tru anunció que este es su último viaje a la Ciudad de México y que está contenta con pasar la batuta a personas jóvenes. Ahora ella se quedará en Ensenada a disfrutar de lo que con tanto esfuerzo han construido. Fueron 60 las veces que visitó la capital durante 15 años.