Una gastronomía para comensales exigentes que conocen la diferencia entre un producto excelente y uno mediocre se crea desde la relación de los cocineros con sus pequeños productores.Vivian Bibliowicz*
Cuando hablamos de cocinas que destacan, hablamos de cocineros que se abastecen de los mejores productos que pueden conseguir de pequeños productores, con quienes mantienen una relación estrecha y conocen de su respeto por el ingrediente. Así es que se crea una gastronomía próxima para comensales exigentes que conocen la diferencia entre un producto excelente y uno mediocre.
El hotel Bairro Alto abrió sus puertas en 2019 y acogió la cocina de Nuno Mendes en su restaurante Bahr , ubicado en el quinto piso del hotel. A pesar de que Mendes radica en Londres, vuelve feliz a sus orígenes y al barrio donde pasó su adolescencia, todas las veces que sea necesario, cargado de ideas y técnicas que aplica para resaltar los productos portugueses que tanto ama.
Nuno heredó la pasión por la cocina de su padre y abuela materna, la cual desarrolla de una manera contemporánea sin perder sus orígenes. Esto se refleja en el hecho que el ingrediente principal en su cocina sea el sabor, el cual respeta sin perderle la vista a la estética. Es el caso del cigarro relleno de algas con la conocida y adictiva salsa Bulhão Pato hecha con cilantro, el cual tan solo rememorarlo, salivas con deseo de volver a probarlo.
Y de la tostada de percebes ahumados (con la cantidad justa de humo) pelados y montados sobre una tostada con mantequilla de la isla portuguesa Ačores. Un bocado delicioso para no perderse y por esa razón es un éxito rotundo entre sus comensales que vuelven a visitar Bahr constantemente.
También regresan a este recinto gastronómico en búsqueda del tartar de atún a la manera de Algarve con limón y cebolla, que se acompaña con el pan de masa madre de trigo y avena.
Le siguen otras delicias como el rape, tostada con foie y caldo de azafrán e hinojo. Después el rodaballo salvaje sobre un caldo verde y chorizo, que te llena la boca de sabor.
Para terminar la experiencia melón, fresas, aceite de oliva y eneldo y un postre- que relata Nuno le encanta comer al finalizar el servicio- de mousse de chocolate, vinagre y papas fritas.
Bahr
Hotel Bairro alto Praça Luis de Camoēs, 2 Quinto piso. Lisboa-Portugal
